martes, 26 de marzo de 2013

Intento fallido.

He intentado cambiar, mejorar.
He intentado sonreír, ser positiva y feliz ante todo.
Quise hacer feliz a mis padres, a mis amigos, pero yo no soy así, no voy a cambiar. No voy a hacer lo que ellos creen que me va a hacer bien o me ayudará porque no lo hará.
Perdón. 
Pero mi interior ya se pudrió, no se puede curar. 
Y no digan que no lo intenté, porque sonreí por mucho tiempo, no lloré en las noches, no me corté y luché por lo que quería. No más, ya me rendí. Mi alma no puede más, está cansada de no poder encajar en la vida 'ideal'. 
Mis hombros no aguantan el peso de la presión que me causan los demás. 
Hoy digo basta, hoy me rindo. 
Las pesadillas me atormentaron por la noche. No soy feliz y no puedo serlo. Ya lo asumí, algunas personas nacieron para ser exitosas, felices o hermosas, no es mi caso. 
Quiero dejar de sentir, quiero librarme de la vida. La vida que me aprisiona, no me deja  ser libre y yo quiero volar, ser aire, ser invisible, ser tan solo nada. 
Necesito liberar todo este dolor, este malestar que ocupa todo mi cuerpo y no me deja respirar.
La oscuridad me aterra. Solo necesito que alguien prenda una vela. Pero la espera de ese alguien se hace interminable. Ya no aguanto este miedo y por eso prefiero liberarme.
Perdón. Fallé otra vez.